miércoles, 27 de marzo de 2019

A veces no estoy


Escribir es desenterrar a los muertos

por eso en estos días ando apuntalando luceros

no tengo fuerzas para ahondar en la tierra

sacando cadáveres a la luz de los sueños.

 

Escribir es volcarse a sangre y fuego

sofocando el aluvión insomne de los recuerdos.

Escribir me arrastra al vértigo de los sin mañana

saltando enajenada la barrera del tiempo.

 

Por eso en estos días ando deshilvanada apuntalando luceros

sin fuerzas para desenterrar lo que me abrasa por dentro

escarbo en la nada y me adentro, naufrago en el mar

dejándome llevar, a la deriva, desdibujada, en silencio.